viernes, 27 de marzo de 2009

Por qué no me gusta el HIPERREALISMO FOTOGRÁFICO (hdr)?

No lo sé. Pero no tengo ninguna intención de dominar programas de
retoque fotográfico para intentar que mis fotografías adquieran unas
tonalidades que me hacen daño en los ojos. Quizá sea el mismo motivo por
el que no tengo ningún interés en sustituir mi actual pantalla de
televisión por una HD y un blue-ray. Y quizá sea por lo mismo por lo que
me he pasado al BW. Prefiero el grano de los carretes tradicionales, no
porque me aferre a un pasado o porque quiera utilizar técnicas
anacrónicas. Y eso que los actuales carretes casi han conseguido
eliminar el grano a isos relativamente altos y en ampliaciones, o
detalles, considerables. Vivimos en el mundo de la imagen digital,
virtual, ideal, idealizada. Y eso está muy bien para muchas cosas, por
ejemplo para compartir información, experiencias, conocimienos, puntos
de vista,... Pero no pretendamos hacer un mundo paralelo a base de lo
que no es, o de lo que nos gustaría que fuera, exagerando la realidad,
lo que entendemos por realidad, que a su vez la hemos construido a base
de imágenes. Algo parecido pasa con la nitidez, para qué tanta nitidez
si no somos capaces de sentir algo más. Quizá por eso sólo nos fijamos
en la dichosa nitidez.