Hacía meses que no se hablaba en este blog de las innumerables novedades Nikon en el terreno digital.
La Nikon D3100 puede cumplir las expectativas del aficionado entusiasta más exigente. A destacar la nitidez y limpieza del sensor. El cuerpo se ha reducido al máximo, resultando muy ligero y compacto, pero algo incómodo, por ejemplo cuando queremos bloquear el enfoque. La evolución de la D50, la D40 y D60 apuesta por la facilidad de uso, guiando al usuario en la toma de decisiones. Se pueden aplicar filtros y retocar las imágenes sin necesidad de PC.
Para las siguientes fotografías se ha utilizado un 50mm f 1.8 de la Serie E. Por supuesto en modo manual, el exposímetro no se activa.
Para las siguientes imágenes se utilizó un 18-105 3,5- 5,6 VR. Imposible el bloqueo del enfoque de la segunda foto, pero la he subido por el fondo. 70mm en f5,6 frente al 50mm, que son 75mm, en f2,8 de las imágenes superiores.
Yo me quedo con el 50mm manual. Imposible bokeh con las lentes modernas, salvo que te vayas a objetivos por encima de los mil euros. Además de esos fondos mucho más suaves en f2.8 y f4, el 50mm (que en este cuepo cabe suponer que es un 75mm) combina a la perfección con un cuerpo tan diminuto. Se acaba de anunciar la D3300 con un a nueva serie de objetivos, los VRII, más compactos que sus precedesores, aunque no tan luminosos como la Serie E, que corroboran lo dicho.
Arriba, la D3200 y la D3100
Abajo, la nueva D3300 con el nuevo objetivo VR II.
