jueves, 6 de mayo de 2010

Mi experiencia con una LPL C6700


A poco que busques por la red, comprobarás que estamos ante una máquina
muy respetable y hasta imponente. Junto a las sencillas ampliadoras de
condensación clásicas y estilizadas, la LPL C6700 destaca por su tamaño
(108 cm de altura) y su solidez . A izquierda y derecha del cabezal
sobresalen una ruedecitas para el control de los filtos: azul, magenta y
yellow. En el frontal, una escala numérica para cada uno de esos colores
puede crearnos cierta confusión, pero pronto apreciamos su utilidad y
recordamos los pequeños filtros ilford utilizados en otras ampliadoras
desprovistas de este cómodo sistema. Además, el cabezal de la LPL, que
recordemos que incorpora un muy útil sistema de difusión, se desplaza
verticlamente de una manera muy suave con sólo presionar una especie de
pinza unida al chasis. Admite negativos desde 35mm hasta 6x7cm, y
permite recortar el área con cuatro cortinillas de la sofisticada caja
portanegativos.
La cuestión clave es si después de utilizar una ampliadora como la LPL
podremos volver a las Meopta.
Pero entremos en materia: el positivado, la utilización de los filtros y
la elección del tipo de papel según nuestros gustos y los efectos que
queramos conseguir, a saber, más o menos contraste, más o menos escala
de grises y más o menos imagen plana o profunda. Todos sabemos que el
filtro amarillo en la ampliadoras reduce el contraste. Y en el papel RC
Foma 311 S 13x18 un valor Yellow a por ejemplo 100 de la LPL C6700
requiere 90 segundos, revelado en Ilford Wartone 1+9 sin prisas (2
minutos o más) frente a los 5 segundos que requiere el mismo papel del
mismo tamaño pero con unos valores de MAGENTA 100 y Yellow 0. Algunas
de las copias, algo subidas, serán viradas al sepia con el sulphide
toner de tetenal.Y hasta sin filtros se puede utilizar la LPL C6700,
digo esto porque tengo un cacao mental que me marea y es uno de los
riesgos del arte de la fotografía en blanco y negro: querer dominar
todas sus potencialidades y posibilidades como si del photoshop
estuvieramos hablando. El revelado en el laboratorio requiere tiempo y
paciencia, hacer pruebas y gastar mucho papel y químicos caros. Y en
ocasiones una sola foto puede llevarnos varias tardes de dedicación y
comparaciones. Pero la diferencia salta a la vista y si colocas una foto
positivada junto a una impresa..., o quizá no notes nada o incluso te
parezca "mejor" la impresa. Pero sobre lo que no hay duda es sobre el
olor, una foto positivada te puede trasportar a otros mundos aún sin
verla, sólo con olerla.